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El adiós de Nadal: los cinco grandes momentos de su carrera

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Hector Nuñez

¿Quién soy? Pues según mi pasaporte, soy Héctor Núñez y según lo vivido, soy periodista y marketero.

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Rafael Nadal se retira del tenis. El tenista balear, uno de los más grandes de la historia, anunció recientemente que colgará la raqueta tras la disputa de la fase final de la Copa Davis. Desde Codere hemos repasado los principales momentos de la trayectoria del balear, seleccionando los cinco grandes instantes de una carrera de lo más exitosa en la que conquistó hasta 22 títulos de Grand Slam y dos oros olímpicos.

La Copa Davis de 2004

Aunque su nombre ya venía sonando con fuerza en el circuito ATP, Rafa Nadal se dio a conocer entre el gran público durante la Copa Davis del año 2004, especialmente en la gran final del torneo. En la misma, en el Estadio de la Cartuja (Sevilla), España se medía a los Estados Unidos en una pista de tierra batida, más favorable para sus intereses.

Con Carlos Mor como principal baza, Rafael Nadal sería el número 2 del cuadro español. Moyá derrotó cómodamente a Fish en el primer duelo de la serie antes de que Nadal se midiera frente a frente con uno de los grandes tenistas del momento: Andy Roddick, ex número 1 del mundo y ganador del US Open en el año 2003.

El cañonero de Nebraska era temido por su saque, pero un jovencísimo Nadal puso a La Cartuja en pie con un partido sublime en el que remontó al estadounidense, imponiéndose en el duelo por 6-7, 6-2, 7-6 y 6-2 para desatar la locura en las gradas, allanar el camino a la conquista del título y comenzar a escribir las primeras páginas de oro de su carrera.

Su primer Roland Garros en 2005

Habiendo ya deslumbrado en los torneos previos, la gran confirmación de Rafa Nadal se produjo en Roland Garros 2005. Aquella edición supuso el inicio del romance del manacorí con la legendaria pista Philippe Chatrier, que le ha visto levantar el preciado trofeo del Grand Slam parisino hasta en 14 ocasiones a lo largo de su carrera profesional.

En ese torneo de 2005, Nadal partía como cuarto cabeza de serie y se plantó sin grandes problemas en las semifinales tras superar a Burgsmüller (6-1, 7-6, 6-1), Malisse (6-2, 6-2, 6-4), Gasquet (6-4, 6-3, 6-2), Grosjean (6-4, 3-6, 6-0, 6-3) y Ferrer (7-5, 6-2, 6-0). En la antesala de la final el rival era un Roger Federer que venía de ganar tres Grand Slams en 2004 y estaba en los primeros compases de su reinado en el circuito ATP.

Pese a ello, el suizo sucumbió ante un Nadal imperial, con el español imponiéndose por 6-3, 4-6, 6-4 y 6-3. Ello le valió el pase a la gran final ante Mariano Puerta. El argentino sorprendió a Rafa y se llevó el primer set de aquel partido, pero el manacorí, pese a su juventud, demostró ser una roca a nivel mental y le dio la vuelta al marcador (6-7, 6-3, 6-1, 7-5) para sumar el primer Grand Slam de su vida.

Un 2008 de leyenda: Roland Garros, Wimbledon y oro en Pekín

Sin lugar a dudas, 2008 fue uno de los mejores años de la carrera de Rafa Nadal. El de Manacor, que arrancó con una semifinal en el Abierto de Australia, sumó meses después en París el que sería su cuarto Roland Garros consecutivo tras superar en la gran final a Roger Federer por un brutal 6-1, 6-3 y 6-0. El torneo parisino supuso el arranque de un verano espectacular para el español.

Y es que en el mes de julio, tras dominar en la tierra batida, Nadal saboreó por fin la gloria en Wimbledon, donde había sido finalista en 2006 y 2007 frente a Federer. En esta ocasión, el balear se impuso al helvético en el All England Tennis Club en uno de los mejores partidos de tenis de la historia por un marcador de 6-4, 6-4, 6-7, 6-7 y 9-7.

Con la doble corona en París y Londres, Nadal sumó un mes más tarde una nueva y deseada conquista en China, pues logró ante Fernando González la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín, redondeando un 2008 en el que, además de numerosos Masters 1000 (por aquel entonces, Masters Series), también alcanzó con España la Copa Davis.

El US Open 2010 para cerrar el círculo en un año casi perfecto

Sin lugar a dudas, 2010 es uno de los años más exitosos de Rafa Nadal. De hecho, a nivel de Grand Slam, es el mejor año de siempre del balear. Comenzó de manera regular con una retirada durante los cuartos de final del Open de Australia. Sin embargo, ese iba a ser el único lunar a lo largo de unos meses en los que nadie pudo parar a Rafa.

En Roland Garros, después de haber caído en 2009 de manera sorprendente y con problemas físicos ante Söderling, Nadal recuperó su corona a lo grande, derrotando en la gran final al propio tenista sueco que le había vencido el año anterior por 6-4, 6-2 y 6-4. Poco después, en Wimbledon, el balear también reconquistó el cetro perdido en 2009 (se ausentó del torneo por lesión) tras barrer en la finalísima a Tomas Berdych (6-3, 7-5 y 6-4).

Para redondear su 2010, en el US Open, Nadal completó el Grand Slam de carrera, es decir, el hecho de haber conquistado todos los grandes en al menos una ocasión, tras apuntarse el torneo estadounidense por 6-4, 5-7, 6-4 y 6-2 ante el que sería su gran rival en los siguientes años hasta el final de su carrera deportiva: el serbio Novak Djokovic.

La remontada imposible en el Open de Australia 2022

Entre los grandes momentos del tramo final de su carrera, sin ningún tipo de dudas, se encuentra la gran final del Open de Australia de 2022. La misma supuso su título de Grand Slam número 21 (meses más tarde sumaría el 22 en Roland Garros) y el mismo llegó tras un duelo legendario ante un Daniil Medvedev que le tuvo contra las cuerdas. Sin embargo, cuando todo parecía perdido, apareció la leyenda de Nadal.

El ruso, que partía como favorito, fue un ciclón durante la primera parte del encuentro y se anotó las dos primeras mangas del mismo por 2-6 y 6-7. Ese tie break del segundo set parecía ser la puntilla para las aspiraciones de Nadal, que con Medvedev llevando la iniciativa en el saque se vio abajo en el tercer set por 2-3 y con un 0-40 en contra. Las probabilidades de triunfo del ruso en ese momento eran superiores al 99%.

Sin embargo, en un juego para la historia, Nadal le dio la vuelta a la tortilla y comenzó desde ese momento una remontada milagrosa que terminó con el de Manacor logrando su segunda corona en Melbourne por un marcador de 2-6, 5-7, 6-4, 6-4 y 7-5 tras 5 horas y 24 minutos inolvidables para el deporte de la raqueta y para el propio Rafael Nadal Parera.

Otros momentos para la historia

De manera lógica, una carrera como la de Rafa Nadal es muy complicada de resumir en cinco momentos concretos. Y es que al margen de los anteriormente expuestos, la trayectoria del de Manacor tuvo enormes momentos más allá de esos cinco.

Entre los mismos valdría la pena mencionar todas y cada una de sus conquistas en Roland Garros, incluida la de su 22º y último Grand Slam, el oro olímpico en dobles en Río 2016, sus victorias en el Masters 1000 de Madrid, sus lágrimas en la despedida de Federer en la Laver Cup o, más recientemente, el momento en el que portó la antorcha olímpica en París 2024 y su dúo de dobles con Carlos Alcaraz en dicha competición.

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